El Gran Premio de Canadá dejó sensaciones positivas para Mercedes, que se mostró conforme por haber podido controlar el problema del 'porpoising'. Por si fuera poco, desde la escudería alemana anticiparon que llegarán al fin de semana de Silverstone con importantes actualizaciones.

A pesar de estas mejoras y que las condiciones del monoplaza W13 deberían adaptarse mejor a la pista de Gran Bretaña, los de las flechas plateadas no esperan que los rendimientos disten mucho de lo que se viene observando en la temporada respecto de Red Bull y Ferrari.

Así lo dejó ver el jefe del equipo Mercedes, Toto Wolff, quien reconoció la compatibilidad del 'nuevo' circuito de Silverstone, pero decidió medir sus expectativas y afirmó que aún queda mucho trabajo y desarrollo por encarar.

"Silverstone ha sido un buen circuito para nosotros en el pasado y el trazado es más liso en comparación con los tres últimos, pero no es Barcelona. Deberíamos gestionar nuestras propias expectativas y limitarnos a trabajar duro, analizar los datos y encontrar soluciones sensatas: no sólo para Silverstone, sino también para el futuro", declaró.

En sintonía con el austríaco se mostró el director técnico, Mike Elliot, quien también se reconoce por detrás de los de Milton Keynes y Maranello: "Creo que Silverstone será un circuito que se adapte a nosotros un poco mejor, como lo fue Barcelona, pero seguirá siendo un poco difícil. Pase lo que pase, daremos nuestro máximo esfuerzo. Nuestros pilotos se esforzarán y lo darán todo porque queremos volver a ganar".