"Sí, señor. Give the ball to Raul and he will score (Pasa la pelota a Raúl y él marcará)".

Durante mucho tiempo fue el himno de los aficionados del Wolverhampton en cada partido del equipo. No importaba el rival, mucho menos la competición. La esperanza de que Raúl Jiménez podía cambiarlo todo con un remate al arco, muchas veces fue lo único a lo que podían aferrarse en las tribunas del Molineux Stadium.

Era algo así como un ritual. Y bastante efectivo, por cierto. Bastaba que le llegara el balón del crack mexicano para mandar el balón al fondo de las redes y de esta manera cambiar el partido. No sucedió tan seguido en la temporada que acaba de culminar, pero lo cierto es que la dependencia en Jiménez sigue intacta en el Wolverhampton.

Y es que a pesar de que esta fue la peor temporada de Jiménez desde que llegó a Inglaterra, el delantero mexicano culminó nuevamente como el máximo goleador del equipo con seis tantos. También fue el líder en asistencias con cuatro pases de gol, lo que refleja la importancia que tiene el Lobo de Tepeji para los de Bruno Lage.

Todos estos números son mucho más importantes si se toma en cuenta el contexto en el que Jiménez regresó a la actividad para esta temporada, luego de un largo periodo de inactividad que incluso puso en duda su carrera. En Bolvavip hacemos un repaso del camino recorrido por Raúl Alonso en la temporada que culminó este 22 de mayo:

Una pretemporada atípica

Raúl Jiménez durante el amistoso de pretemporada ante Betis (Getty Images).

Raúl Jiménez durante el amistoso de pretemporada ante Betis (Getty Images).

Luego de varios meses sin trabajar con normalidad por la fractura de cráneo que sufrió en noviembre de 2020, Jiménez poco a poco fue sumándose a los entrenamientos de los Wolves y no tuvo minutos hasta la pretemporada. Sin embargo, su adaptación fue de forma progresiva y el club no quiso correr riesgos innecesarios que comprometieran la integridad del atacante.

Jiménez comenzó disputando muy pocos minutos y a medida que pasaban los días, Lage le dio la oportunidad de estar cada vez más tiempo en el campo. Sin embargo, esto hizo mucho más lento el proceso de adaptación del mexicano y fue la causa de que tardara más de lo previsto en recuperar el ritmo de competición que tanto necesita.

Jiménez y una nueva realidad

Raúl Jiménez tras su expulsión ante Manchester City (Getty Images).

Raúl Jiménez tras su expulsión ante Manchester City (Getty Images).

El regreso de Jiménez estuvo condicionado a una serie de medidas, siendo la banda protectora de su cabeza una de las más importantes. Lage aseguró que esto afectó mucho el rendimiento del delantero del Wolverhampton, sobre todo en los remates de cabeza, una de las especialidades de Raúl en el área rival.

"Raúl sigue siendo el mismo jugador. Es un delantero top. No se siente distinto, pero la banda protectora en la cabeza no le da la misma potencia y dirección. A veces cabecea y el balón se va en otra dirección. Es un gran cambio. No podemos olvidar eso", dijo el portugués en entrevista con Sky Sports.

Ahora tiene otro rol

Raúl Jiménez fue el máximo goleador de la temporada del Wolves (Getty Images).

Raúl Jiménez fue el máximo goleador de la temporada del Wolves (Getty Images).

Como si todos estos cambios no fueran suficiente, no podemos ignorar la llegada de un nuevo entrenador del banquillo de los Wolves. Y es que luego de varios años rindiendo a un alto nivel bajo la conducción de Nuno Espirito Santo, Jiménez tuvo que adaptarse a la propuesta con la que Lage aterrizó en el Molineux Stadium hace varios meses.

El fichaje de Hwang Hee-Chan cambió mucho el estilo de juego del equipo. Esto, en principio, hizo que Jiménez retrasara su posición y se desempeñara más como mediapunta. No le vino mal el cambio, pues pudo integrarse en la elaboración de las jugadas y además destacó  con cuatro pases de gol que ratifican su calidad incluso viniendo de atrás.

Los números de Jiménez