Partido cerrado, defensa complicada, y todo lo que uno se puede imaginar desde lo negativo, se forjó. Pero eso, lo destruyó el buen Kylian Mbappé con un movimiento maestro en ataque. El delantero más importante del actual campeón mundial frotó la lámpara como solo él lo sabe hacer.
Francia estaba pasándola mal por lo que había propuesto Dinamarca, porque el fútbol duro y físico parece que no le gusta demasiado. La defensa del cuadro danés terminó siendo muy potente, incomodando a los cracks en ofensiva, al punto de no dejarlos moverse casi.
Sin embargo, una genialidad del más grande proyecto, hecho realidad, sirvió para romper todos los esquemas. Kylian Mbappé una vez más demostró que está para cosas importantes, en esta oportunidad, entregándole alegría a toda su nación con un movimiento de crack.
Lo cierto es que Dinamarca no estaba haciendo una labor para señalarlos como un cuadro menor. Un movimiento en falso por la banda derecha lo terminó alejando de la perfección. Un pequeño desliz, en este caso, los hizo sufrir un poco. Ante un crack como Donatello, hay cosas que no te puedes permitir, esa es una verdad absoluta.