Desde antes de su llegada a la NBA, Trae Young se convirtió en uno de los jugadores favoritos de la audiencia. Y es que, con sus movimientos habilidosos, gran capacidad asistidora y rango de tiro ilimitado, sabe cómo entretener al público.
Si hablamos de rendimientos individuales, no queda ningún tipo de duda de que el joven de los Atlanta Hawks es digno de reconocimiento. Sin embargo, el récord negativo de su equipo pone en tela de juicio su participación en un All-Star Game.
No osbtante, eso no ha impedido que la afición se vuelque en respaldo del ex de la Universidad de Oklahoma, que explicó a The Athletic su deseo de representar a su equipo en el gran juego:
“Mientras tenga más impacto en la cancha, más podré hacer fuera de la cancha. Así lo veo yo. Por eso quiero ser un All-Star. Por eso quiero ser uno de los mejores jugadores en la NBA. Mi plataforma sería más grande y podría hacer mucho más por mi comunidad”, declaró Young.
Recientemente, el base canceló las deudas de hospital de cientos de personas en la comunidad de Atlanta y ha dejado claro que tiene intenciones de ser un filántropo además de deportista de élite.
Con promedios de 28.9 puntos, 4.5 rebotes y 8.4 asistencias por partido y una mentalidad como esta, es difícil no apoyar a Young en su objetivo de ser All-Star.