El 2020 ha sido muy tenso en todos sentidos. La sociedad se ha polarizado con cualquier tema y el coronavirus y toda la falsa información han hecho que los debates sean totalmente vacios.
En estos tiempos también han aparecido algunos enemigos de la sociedad peruana. En su momento condenaron a Carlos Wiesse por racista, a Cineplanet por abusivos y ahora también a Osso por prepotente.
El diario La República también ha estado en el ojo de la tormenta. El periodico que se hace llamar de centroizquierda botó a sus trabajadores en medio de la pandemia. En ese momento, Sigrid Bazán, quien trabajaba ahí, solo se expresó tibiamente.
Ahora, este mismo diario esta siendo acusado de sacar a quienes no están con ellos ideológicamente. Habrían abandonado sus causas sociales y con ello a muchos de sus columnistas y redactores. Además, se les acusa de haber sacado a quienes en su momento reclamaron derechos, lo que la ley del Perú, a diferencia de otros paises, no protege. En esta ocasión, Sigrid, que ya no trabaja ahí, fue más dura.
“Ahí donde el sistema falla, se abren las puertas para el abuso. Toda mi solidaridad con los trabajadores de La República”, escribió por ejemplo la politóloga. “Si bien lo hice en su momento (inclusive en el mismo espacio del diario), reconozco que pude haberlo hecho de forma más rápida o enérgica“, se justificó después por sus primeros mensajes.
Ella escribió todo un hilo dando sus argumentos. Muchos de ellos, hay que decirlo, tienen sentido. Igual, en los comentarios la condenaron por su oportunismo. En fin, bienvenida a la política, Sigrid.