Celta derrotó al Barcelona 4-3 en Balaídos. Pudo ser goleada, pero los locales terminaron sufriendo sobre el final del partido.
Parece mentira que un equipo pueda marcarle al Barcelona ocho goles en dos partidos, pero lo consiguió Celta de Vigo, que al igual que en la pasada temporada le metió cuatro al Barcelona, aunque ésta vez necesitó sufrir mucho más para sumar los tres puntos.
Los dirigidos por Berizzo jugaron una primera parte perfecta, con un nivel en conjunto que no había mostrado a lo largo de las seis jornadas anteriores, y terminó yéndose al vestuario con una diferencia de 3-0 gracias a los tantos de Sisto, Iago Aspas y Mathieu en propia puerta.
En el complemento, Luis Enrique mandó a la cancha a Andrés Iniesta que cumplió 600 partidos como culé.
Sin llegar a tener un buen funcionamiento, Barcelona acortó distancias en el complemento con un tanto de Piqué a los 56′ y otro de Neymar, de penal, a los 64′.
Pero al Celta todavía le quedaba algo para mostrar y el argentino naturalizado chileno Pablo Hernández volvió a aumentar la diferencia luego de un error fatal de ter-Stegen. Fiel a su estilo, el equipo culé no resignó el partido y volvió a descontar con un nuevo tanto de Gerard Piqué a los 87′. Incluso pudo llegar al empate en tiempo de adición, pero faltó la puntería necesaria y los de Vigo fueron los que terminaron celebrando.
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