Que nadie se meta con la FIFA. Esa fue la postura de GianniInfantino tras escuchar las versiones que se dieron sobre la reunión que este mantuvo junto a los máximos mandatarios de River, Boca y Conmebol el sábado, antes que se tomara la decisión inicial de postergar el partido para el domingo.

“No pedí que se jugara el partido ni amenacé con sanciones”, dijo el presidente del ente rector del fútbol mundial para desligarse de las palabras de RodolfoD’Onofrio, quien previamente había dicho que este “obligó a Boca a jugar la final bajo apercibimiento de quedar eliminado e impedido de disputar futuras competiciones internacionales”.

En una entrevista que concedió en exclusiva al diario La Nación, Infantino aseguró que FIFA no tuvo ninguna injerencia en la decisión que se tomó:“Quiero aclarar, debido a la serie de falsos rumores diseminados, queno pedí en momento alguno que se jugara el partido. Tampoco amenacé a nadie con sanciones disciplinarias en caso de que el juego no tuviera lugar. Cualquier decisión sobre éste partido pasa por la Conmebol”.

El sábado, en El Monumental, todas las versiones coincidían en señalar al presidente de FIFA como uno de los más interesados en que el partido se disputara ese mismo día, a las 19.15.