Los hinchas de Boca saben que la Copa Libertadores se gana entre todos. Por eso quieren hacer sentir bien fuerte al famoso jugador número 12.
El primer paso es una caravana que planifican para el 24, día que se juega la gran final ante River. La idea es acompañar desde el hotel hasta lo más lejos posible al micro de los jugadores.
Además, la exigencia es cada vez mayor para planificar un entrenamiento a puertas abiertas en el que puedan ir a alentar al plantel.
Eso, el viernes 23, un día antes del partido más importante de la historia del club.