Estamos viviendo tiempos dificilísimos. El coronavirus en Perú ya mató a miles de personas y quedó demostrado que el país no está preparado para este tipo de crisis.

A los problemas del sistema de salud, se suma la informalidad reinante. Ella no solo significa la presencia de vendedores ambulantes o de no estar en planilla, sino también se ve en el afan por evadir responsabilidades de un gran sector de la población, tanto público como privado.

Este domingo, una triste noticia llegó a nuestros hogares. Y es que un niño murió después de caer en el pozo de un parque.

Tras esto, la indignación fue generalizada. Los principales señalados fueron la empresa de agua y el alcalde de Lima, quienes no se han manifestado al respecto.

Juliana Oxenford, por ejemplo, disparó: “Leo los comunicados de Sedapal, Municipalidad de Lima y ahora resulta que el único responsable de la Muerte de una criatura de dos años es el “pozo”. Siempre lo mismo, la vida no vale nada”.

Como este, muchos mensajes se manifestaron con pena y rabia en busca de respuestas. Desde acá, lamentamos su deceso y nos sumamos al pedido general ¡Justicia!