River comenzó sus entrenamientos en Madrid en un clima muy distendido y relajado, de cara al partido contra Boca.

En los ejercicios para entrar en calor, Gonzalo Martínez sacó toda su calidad para hacer estallar a sus compañeros.

El 10 le metió un hermoso caño a su compañero uruguayo Nicolás de la Cruz, que después de eso se quería morir.

El ya bien apodado Loco festejó lo sucedido como un gran logro personal.