Boston Celtics recibió a Houston Rockets en un encuentro en el cual chocaron dos claros contendientes al título. Celtics marcha tercero en su conferencia, mientras que los Rockets terceros en el oeste.
El encuentro fue atrapante desde el inicio, pero se hizo mucho más entretenido mientras los minutos fueron pasando.
La franquicia texana tenía en su poder una ventaja de tres puntos a cinco segundos del final e, inteligentemente, cortaron con falta a Jayson Tatum en la reposición de los locales.
El jugador de Boston falló el primer lanzamiento, por lo que tuvo que marrar intencionadamente el segundo para tomar el rebote. El balón, después de tocar en varios hombres, incluido James Harden, terminó en las manos de Jaylen Brown.
El escolta de 23 años no dudó y convirtió el triple desde el eje para darle el empate a su equipo enviar el juego a suplementario. Milagroso.
A pesar de la conversión, la visita se impuso en el tiempo extra 111-110, con un Russell Westbrookimplacable con 41 puntos.