El 13 de marzo, de forma más que desprevenida, River, mediante un breve informe publicado en sus redes sociales, confirmó que el joven futbolista Thomas Gutiérrez sería sometido a distintas pruebas para analizar su estado de salud. El jugador en cuestión, integrante de las divisiones inferiores del Millonario, había comenzado a presentar síntomas compatibles con nada más ni nada menos que el coronavirus.

Descartando el peor de los temores, la institución de Núñez, horas después, emitió un comunicado oficial en el cual confirmó que no presentaría a sus equipos para los próximos encuentros estipulados (tanto divisiones inferiores como la primera).

Generándose un auténtico revuelo, lo cierto es que el 14 de marzo el plantel de Atlético Tucumán se hizo presente en las inmediaciones del cuadro de Núñez a la espera de disputar su compromiso por la Copa de la Superliga. Lógicamente, el compromiso jamás fue llevado a cabo.

A partir de allí, un gran debate comenzó a aparecer en las principales discuciones futboleras del país -e incluso las de la mismísmia AFA y Tribunal de Disciplina-: ¿River debía ser sancionado por no presentarse?

A la eséra de una resolución oficial y sin muchas novedades de por medio, Horacio Pagani, exponiendo su postura con respecto al dilema, manifestó que el Millonario efectivamente debe recibir una sanción por no presentarse al compromiso ante el Decano. “River debe ser sancionado por no presentarse“, afirmó el periodista de TyC Sports.

El comunicado con el que River confirmó que no se presentaría a jugar (Foto: Captura)