Luego de haber fallado en los dos primeros goles de Monterrey, Agustín Marchesín se redimió antes del descanso en el Estadio Azteca ante un gran disparo desde 25 metros de Dorlan Pabón.
El delantero colombiano remató con mucha violencia y el portero argentino la llegó a desviar con lo justo para que ambos equipos se marcharan a los vestidores con el 2-2 en el marcador.
Fue un verdadero partidazo entre los azulcremas y La Pandilla, acorde a lo que indicaban los pronósticos, pues hace un lustro que son dos de los mejores equipos de la Liga MX.
Sus números en el torneo pasado: