Juárez vencía por 1-0 al Deportivo Guadalajara con comodidad al cierre de la primera etapa. Sin embargo, un jugador perdió la cabeza y se hizo echar. De esta manera, Chivas se recuperó y logró dar vuelta el resultado.

Darío Lezcano fue el gran responsable de la derrota de Bravos ayer por la noche, la cual significa prácticamente la eliminación de su equipo de cara a la Liguilla.

El paraguayo había marcado el primer gol del encuentro y se estaba desempeñando de buena manera. Pero a pocos minutos del entretiempo, se enfadó con el silbante porque le pitó una falta que, a su parecer, no era.

Por eso rápidamente se le plantó al árbitro y se quejó de la decisión que había tomado. El delantero recibió la tarjeta amarilla y, no conforme con esto, fue por más.

“¿Qué marcas hijo de pu..?”, lanzó el futbolista. Fue demasiado para Ramos Palazuelos, quien optó por mostrarle la roja y expulsarlo.

Ahora, resta saber qué medidas toma el comité de disciplina y cuántas fechas le darán de suspensión a Lezcano.