Boca volvió a convertirse en uno de los ocho mejores equipos de la Copa Libertadores tras dejar en el camino a Athlético Paranaense con un marcador global de 3-0.

Apenas finalizado el encuentro, el entrenador Gustavo Alfaro comenzó a palpitar la serie de cuartos de final ante Liga Deportiva Universitaria de Quito, que tendrá como condimento especial la altura.

“Tuve la posibilidad de jugar en Quito, es distinto a Cochabamba, La Paz, Bogotá. Son 2850 metros.No te agobia como La Paz, pero afecta en dos circunstancias: reservas aeróbicas (los últimos 20-25 con fatiga) y velocidad de la pelota”, analizó el técnico de Boca.

Y agregó: “Contra Liga, ojalá podamos traer la definición a La Bombonera para seguir con la ilusión de la Libertadores. Pero mañana, le diré a los jugadores que hay que ganarle a Patronato”.

Cabe destacar que Liga Universitaria de Quito se metió en los cuartos de final de la Copa Libertadores tras eliminar a Olimpia de Paraguay.