La salida de Gómez se había conocido hace un par de semanas a través de los medios ecuatorianos, pero el anuncio oficial no podía darse hasta que la directiva y el entrenador no llegaran a un acuerdo para el pago de la recisión del contrato tras su despedido.

La FEF habría tenido que pagarle 4 millones de dólares al DT, según lo pactado en el inicio del contrato que se vio truncado por la pobre actuación de Ecuador en la pasada Copa América, donde no logró ganar ni un partido.

Según informó el diario ecuatoriano El Comercio, la propuesta del presidente de la Federación, Francisco Egas, a Bolillo y su cuerpo técnico fue la de pagarles 1,5 millones. La cifra fue aceptada por el estratega.

Agrega dicho medio que el ente rector del fútbol ecuatoriano llegó a un acuerdo con Gómez para evitar demandas en el futuro, y que el dinero de la recisión “será pagado proporcionalmente porque actualmente la FEF pasa por apuros económicos”.

“Nos hemos despedido de la mejor manera con Bolillo”, enfatizó este miércolesFrancisco Egas a los medios de comunicación.