La Copa Libertadores es especial para Paolo Guerrero. El Depredador hizo que su equipo llegue a la fase de grupos por su gol ante Tolima.
Por otro lado, es un campeonato que le es esquivo. Sabe lo que es ganar un Mundial de Clubes, pero no un torneo continental sudamericano.
El año pasado de hecho se quedó con la espina en la garganta. En cuartos de final se quedó contra su ex-equipo, que temrinó siendo el campeón del torneo.
Este año renovó sus esperanzas y deposito su fe en Guerrero. Como no podía ser de otra forma, les dio resultado.
Y es que el Depredador metió un doblete en solo cinco minutos. Primero, la clavó de tiro libre y después aprovechó un mano a mano.
Así, a los 62′ y a los 67′ el peruano apareció. Luego, el delantero asistió a Guilherme para el 3-0 ¡Un partido redondo del Pistolero¡