La tecnología fue protagonista en el duelo que River le ganó 2-0 a Palmeiras por la vuelta de una de las semifinales de la Copa Libertadores.
El conjunto brasileño terminó pasando de ronda gracias al 3-0 que consiguió en la ida, y el VAR hizo de las suyas para que el Millonario no pueda anotar el tercer gol.
Primero que nada, ahogó el festejo de Gonzalo Montiel a los 50 minutos de partido por un offside de Borré varios toques antes de que la pelota toque la red.
Luego, el partido se desvirtuó y el árbitro se vio condicionado además por expulsar mal a Robert Rojas (las dos amarillas que le sacó son cuestionables), cobrando así un penal sobre Matías Suárez que estuvo muy cerca de patearse, hasta que lo llamaron desde la famosa cabina.
Mientras revisaban la acción (la realidad es que el delantero se tiró) era Marcelo Gallardo quien veía bien de cerca la televisión en la que se repetía la jugada una y otra vez.
Una cámara lo captó y apenas se dio cuenta que se había anulado el tiro desde los 12 pasos, su reacción lo dice todo.