Este jueves 29 de octubre, la actualidad del Fútbol Profesional Colombiano amaneció bastante agitada luego de que se realizara, el día anterior, Asamblea Extraordinaria en la Dimayor. Tras la reunión, el presidente de Boyacá Chicó, Eduardo Pimentel, sacudió las redes sociales con graves denuncias de corrupción en el la liga colombiana.

Pimentel, quien es conocido en el FPC por sembrar fuertes polémicas, lanzó varios mensajes en su Twitter donde se mostró sorprendido luego de la Asamblea de la Dimayor. Allí afirmó que varios colegas suyos denunciaron que hay grupos privados de Whatsapp entre dirigentes donde se estarían “comprando árbitros y arreglando resultados de partidos”.

La segunda denuncia de gran calibre tiene que ver con supuestas amenazas en la que involucró a Once Caldas y América de Cali. En primer lugar, hizo referencia a la millonaria multa que le clavaron al equipo de Manizales y los puntos que le quitaron por una mala inscripción de un jugador. Dimayor decidió darle la victoria, en el escritorio, a Deportivo Pereira.

Luego, hizo alusión a la polémica que surgió con América de Cali y la supuesta “inscripción irregular” de un portero cuando no pudieron contar con Éder Chax y Joel Graterol. Según Pimentel, la inscripción de otro portero se hizo de manera ilegal y nadie hizo nada para reparalo.

Tras estos polémicos trinos, Eduardo Pimentel atendió a los medios y allí ratificó cada una de sus denuncias. Incluso, aseguró que la corrupción en el FPC “está incontrolable” y aseguró que, en su calidad de Presidente, pedirá a la Junta Directiva del Boyacá Chicó retirar al equipo de la Dimayor.