La tenista china Peng Shuai, que estaba desaparecida desde el 2 de noviembre último tras haber denunciado el acoso sexual del exviceprimer ministro de su país, apareció este domingo. Así lo anunció el Comité Olímpico Internacional (COI), a partir de una videoconferencia de “treinta minutos” que su presidente, Thomas Bach, mantuvo con la tenista. El COI detalló que la tenista asiática “explicó que estaba sana y salva, en su casa de Pekín, pero que le gustaría que su vida privada fuera respetada”, según señaló la institución sobre la videollamada, en la que además participaron la presidenta de la comisión de atletas, Emma Terho, y la china Li Lingwei, que pertenece al COI.
Peng “prefiere pasar su tiempo con amigos y familiares en este momento. Sin embargo, seguirá participando en el tenis, el deporte que tanto ama”, informó el COI.
Al respecto, Emma Terho dijo: “Me alivió ver que Peng Shuai estaba bien, que era nuestra principal preocupación. Parecía estar relajada. Le ofrecí nuestro apoyo y estar en contacto en cualquier momento de su conveniencia, lo que obviamente agradeció”.
Asimismo, Bach dijo que invitó a Peng Shuai a cenar una vez que llegara a Pekín en enero próximo, en la previa de los Juegos Olímpicos de Invierno que allí se desarrollarán entre el 4 y el 20 de febrero de 2022.
La situación de Peng Shuai puso en alerta a toda la comunidad deportiva y generó un sinfín de suspicacias y, al margen de su aparición, aún se mantienen dudas sobre su verdadera libertad tras haber denunciado por agresión sexual a Zhang Gaoli, quien de 2013 a 2018 formó parte del Comité Permanente del Politburó del PC, el máximo órgano de gobierno que rige en China.
La videollamada entre Peng y Bach se dio a conocer justo el mismo día en que el editor jefe del diario internacional del Gobierno chino Global Times, Hu Xijin, publicara en su cuenta de Twitter un video que muestra a la tenista en una ceremonia de apertura de un torneo de tenis en China.
Sin embargo, la WTA respondió que ese video “no alivia las preocupaciones por su bienestar y por su capacidad para comunicarse sin censura y coerciones”, según expresó un vocero del ente que rige el tenis femenino a nivel mundial en un correo electrónico enviado a diversas agencias de noticias y medios de comunicación. Y amplió: ” Ha sido bueno haber visto a Peng Shuai en videos recientes, pero estos no alivian ni abordan la preocupación de la WTA respecto de su bienestar y de su habilidad para comunicarse sin censura ni coerción. Este video no cambia nuestra petición de que se realice una investigación completa, justa y transparente sobre sus acusaciones de abuso sexual”.
Estas dudas de la WTA también son sostenidas por organismos de derechos humanos que expusieron su temor por la seguridad de la tenista. Por caso, Yaqiu Wang, de Humans Right Watch, considera que la conversación entre Bach y Peng se habría realizado bajo coerción. “El COI está siendo cómplice de la maquinaria de propaganda y de un caso de coerción y de desaparición forzada por parte del Gobierno chino”, publicó la activista en su cuenta de Twitter.
El caso Peng estalló a menos de tres meses de que comiencen los Juegos, a los que Estados Unidos evalúa boicotear a nivel diplomático por presuntos abusos de derechos humanos por parte del Gobierno chino. Por su parte, China considera que tales acusaciones no son más que una “campaña de difamación” y que “politizar el deporte va en contra del espíritu olímpico”, recalcó ayer el portavoz del Gobierno chino, Zhao Lijian, a una pregunta sobre este posible boicot, al que, según el diario británico The Times, podrían también sumarse otros países como Reino Unido, Australia o Nueva Zelanda.
Por su parte, para el Gobierno chino, la comunicación entre Bach y la tenista es “suficiente” para despejar cualquier duda. “No es un asunto diplomático”, destacaron desde el Ministerio de Asuntos Exteriores, mientras que el portavoz Zhao sostuvo que “se la ha visto recientemente” en respuesta a las preguntas de los periodistas.