"El fútbol es uno de los deportes más multirraciales e inclusivos del Reino Unido. Por eso, el equipo de Gran Bretaña apoyará siempre a los deportistas y su derecho a promover la igualdad y una sociedad más justa cuando se haga de forma pacífica, con respeto y sin provocar altercados" . Las palabras de Andy Anson, presidente del Comité Olímpico Británico, tuvieron una misión. Bajar los decibles y evitar tensar las relaciones con el Comité Olímpico Internacional (COI) que, en más de una ocasión, advirtió que no tolerará protestas ni reclamos con tinte político. "Al arrodillarse, las mujeres de nuestro equipo de fútbol darán testimonio de los valores del equipo británico " , dijo Anson.
En sintonía con lo hecho por el equipo masculino de fútbol, que en la reciente Eurocopa se arrodilló antes de cada partido, las jugadoras buscarán extender su mensaje en medio de los Juegos Olímpicos de Toki0 2020. Si bien, el equipo masculino recibió abucheos de algunos espectadores y el propio Ministro del Interior inglés Priti Patel lo calificó de "gesto político", la decisión está tomada y no tendrá vuelta atrás.
"Me siento afortunada de ser parte de un grupo que busca un cambio para frenar el racismo, la discriminación. Este grupo comparte el mismo mensaje y queremos fomentar el cambio poniendo rodilla en tierra”, sostuvo Ellen White, delantera británica y del Manchester City, en una videollamada desde Japón. “Y soy solidaria con quienes han sido afectados”, añadió.
En verdad, tras un análisis interno y pensando siempre para atraer agua a su molino, con medidas que resulten empáticas y los postulen como amplios y abiertos a los tiempos que corren, el COI suavizó o tamizó las reglas que prohíben las protestas políticas en los Juegos.
Por eso, autorizaron el gesto de bajar la rodilla y apoyarla sobre el piso como símbolo de la lucha (un lucha que el COI pretende sacar rédito, claro está) contra el racismo, así como expresar sus posiciones ante los medios y en redes sociales o llevar camisetas con mensajes de protesta en las conferencias de prensa. Lo que no cambia para el COI es la prohibición de las manifestaciones políticas durante las pruebas, las ceremonias de entrega de medallas y dentro de la Villa Olímpica .
En el mundo del deporte, se extendió este tipo de reclamo (rosilla sobre el suelo). Sobran los ejemplos en el fútbol americano, el básquet, el béisbol. Y el fútbol, incluso el español, tampoco fue ajeno a esta manera de dar visibilidad a la problemática de violencia policial y racista hacia las minorías. Sobre todo, tras el asesinato de George Floyd, el 25 de mayo de 2020 a manos del oficial de la policía, Derek Chauvin.