El ambiente del fútbol muchas veces puede ser cruel. Más cuando el jugador tiene una edad en la que por su cabeza todavía no alcanzó la fortaleza suficiente para soportar las presiones.

Bojan Krkic sufrió mucho cuando, en sus inicios, lo comparaban con Lionel Messi. Con apenas 17 años, se integró a la perfección en aquel equipo de Pep Guardiola.

Pese a todo, fue un buen socio de Leo en el ataque del Barça.

Sin embargo, una supuesta renuncia a la Selección española comenzó a jugarle en contra. Al delantero lo insultaban en todos lados y su vida pasó de la gloria al calvario.

“No fui a la Eurocopa del 2008 por problemas de ansiedad. Me llamaron para jugar ante Francia y no debuté porque dijeron que tenía gastroenteritis. En realidad, tenía ansiedad. Nadie quería hablar de eso. El fútbol no estaba interesado. Todo iba bien, pero hay un momento en que tu cuerpo te dice que pares.Cuando llegó la Eurocopa decidí que no podía ir, tenía que aislarme. Al otro día, los periódicos decían que le había dicho que no”, dijo el hoy futbolista del Alavés. ¡Duro!