En los primeros minutos jugados en el Camp Nou,Napolino había tenido eficacia de frente al arco: solo por eso se explicaba que el partido seguía 0-0.
Sin embargo, a los diez minutos de juego, en el segundo saque de esquina que tuvoBarcelona, el dueño de casa no perdonó.
AparecióClément Lenglet, quien ganó con más fuerza que posición en el área y metió un cabezazo perfecto.
Le cambió el palo a un David Ospina que se estiró al máximo, pero no pudo ni impactar el balón del defensor.
Así, Barcelona abrió el marcador y se puso en ventaja. Un comienzo perfecto para el conjunto azulgrana.
¡Empezó bueno el partido!