Corría el año 2011. Zaragoza cerraba su temporada ante Levante y necesitaba de una victoria para mantener la categoría y no descender.

La visita, logrando su objetivo, se quedó con las tres unidades y aseguró la permanencia al vencer al dueño de casa por el ajustado resultado de 1 a 2 en su favor.

Con el correr del tiempo, una dura acusación fue emitida en contra de los deportistas involucrados en dicho cotejo. Siendo Leonardo Ponzio acusado como uno de los principales responsables, todos los futbolistas fueron procesados por haber arreglado la victoria en favor del Zaragoza.

Luego de muchos años, la Justicia determinó este lunes que no existían suficientes pruebas para encarcelar a los jugadores y decidió absolverlos a todos.

Por su parte, tantoAgapito Iglesias (presidente del Zaragoza en aquel entonces) yJavier Porquera (también parte de la directiva de la institución) fueron condenados a un año y tres meses de prisión.