Arsenal no quiso apurarse en el pasado mercado de fichajes, pero hay un plan que todavía sigue en pie y por el que están preparando una suma de dinero imposible de rechazar: fichar a Mauro Icardi.
Es cierto que los Gunners acaban de incorporar a un goleador de la talla de Pierre-Emerick Aubameyang, pero las partidas tanto de Olivier Giroud como de Alexis Sánchez, y podría agregarse la de Theo Walcott, hacen pensar a Wenger que el balance de la ofensiva le da desfavorable.
Claro que el entrenador francés podría ya no estar en Arsenal tras el Mundial, dependiendo de los resultados, porque los mismos que alertaron del interés del equipo por Icardiseñalan a Maurizio Sarri, entrenador del Napoli, como el hombre que la directiva gunner quiere en el banquillo.
Es cierto que las aspiraciones del delantero era llegar a un equipo con mayores pretensiones deportivas que su Inter, pero la posibilidad de perderse el Mundial con Argentina, relegado por otros delanteros, conspira contra esos deseos. Además, como se dijo, en Londres ya preparan un ofrecimiento al que, esperan, será imposible decir no.