Tras la última exhibición de Mohamed Salah en Anfield, en el partido de ida de semifinales de la Champions League ante Roma al que aportó dos goles y dos asistencias, en Liverpool decidieron que es el momento de blindar al egipcio.

La mayor amenaza para la continuidad del goleador en los Reds es el interés creciente que ha generado en Real Madrid, donde ya lo habrían colocado como uno de los fichajes prioritarios para la próxima temporada, como reemplazo de un Karim Benzemá que parece no tener nada más para ofrecer a Florentino Pérez.

Pero Liverpool considera a Salahintransferible y es por eso que, según el diario británicoDaily Mail, ya le preparan una nueva cláusula de rescisión que rondará los 230 millones de euros.

El monto, sin embargo, podría quedarse corto teniendo en cuenta que del otro lado existen gigantes con el dinero suficiente como para cubrirlo. La prueba más reciente es que PSG se llevó a Neymar por apenas 10 millones de euros menos. Y la temporada del egipcio, nobleza obliga, ha sido ampliamente mejor que la del crack brasileño.