Pasaron 57 años entre una final y la otra. Una, claro, fue la primera de todas, del equipo masculino, siendo locales y logrando el único título mundial para Inglaterra. La otra será este domingo 20 de agosto, cuando las Lionesses buscarán cerrar una temporada histórica en la que primero se quedaron con la Eurocopa 2022, luego con la Finalissima ante Brasil y ahora ante España quieren coronarse por primera vez en la Copa del Mundo femenina. Tienen con qué.
No es para nada una casualidad que las inglesas hayan llegado a esta instancia en un Mundial en el que fueron de menor a mayor, empatando un partido (ante Nigeria en octavos, sin goles) y ganando los otros cinco, convirtiendo 13 goles y recibiendo apenas 3.
Una DT histórica
Cuando Inglaterra comenzó este proceso, fueron a buscar a la mejor de todas. Sarina Wiegman nació en La Haya, Países Bajos, en octubre de 1969. Fue capitana de su selección y se convirtió en la primera futbolista neerlandesa en completar 100 partidos con su camiseta nacional. Pero lo mejor llegaría como entrenadora: asumió en Países Bajos en 2017 y seis meses después se quedaría con la Eurocopa de aquel año, la primera vez que la naranja lograba este título.
Ese año logró el premio The Best dela FIFA como mejor entrenadora. En el 2019 llevó a su equipo a la final del Mundial, en la que cayó nada menos ante Estados Unidos por 2 a 0. En los Juegos Olímpicos de Tokio, a los cuales se clasificó por primera vez, llegó hasta los cuartos de final. A esa histórica DT, que hasta tiene una estatua en la federación local, fue a buscar Inglaterra para dar un salto de calidad en la selección.
Ganó la Eurocopa venciendo a Alemania 2 a 1 en la final jugada en Wembley. Y así como se convirtió en la primera entrenadora en ganar dos Eurocopas con dos selecciones distintas, ahora se transformó en la primera entrenadora -hombre o mujer- en llevar a dos selecciones diferentes a la final de un Mundial.
Salto de calidad
Las inglesas buscaban ese salto de calidad en el equipo nacional, sabiendo que tienen una de las ligas más fuertes del mundo. De hecho, es el país que más jugadoras le dio a este Mundial: 107 en total. En el plantel inglés, a excepción de Lucy Bronze y Keira Walsh que juegan nada menos que en el Barcelona campeón de la Champions League y Georgia Stanway que lo hace en el Bayern Munich alemán, el resto todas disputan la liga local. Chelsea, Manchester United, Manchester City, Arsenal, Tottenham, Brighton…
De hecho, hay una singularidad con el partido ante Australia por las semifinales: 10 de las Matildas también juegan en la liga inglesa. Sam Kerr, la estrella local, es figura en el Chelsea.
Un equipo de estrellas
Pese a ser candidatas por haber logrado el título en julio 2022, las Leonas encaraban el Mundial con algunas bajas que las ponían en duda. En la previa se quedó sin Beth Mead, Leah Williamson y Fran Kirby, tres figuras absolutas del equipo, por lesión en el ligamento cruzado. Tras comenzar con un 1-0 el debutante Haití y dejar algunas dudas, luego lograron la victoria ante Dinamarca pero con otra pésima noticia: debió salir lesionada la volante Keira Walsh.
¿Qué haría el equipo sin su reloj del mediocampo, su jugadora más destacada? Y allí apareció la joven Lauren James para hacerlos olvidar de Walsh y marcar el camino. Sin embargo, tras el 0-0 ante Nigeria, la jugadora del Chelsea fue suspendida por dos fechas por un pisotón. ¿Qué podrá hacer sin su joven promesa? Allí apareció el resto para dar la talla con Colombia, dando vuelta un resultado con las mismas dos estrellas que ante Australia.
Porque si bien se destacan a nivel individual, Inglaterra se sostiene por el trabajo en equipo y gracias a eso sus figuras brillan. Ante las Matildas otra vez aparecieron Lauren Hemp y Alessia Russo, respaldadas por Ella Toone en el medio (junto con Walsh, que pudo regresar), por una Millie Bright que es un perro de presa en el área pero que también con sus pelotas largas y cruzadas marca el camino para romper líneas.
Y toda esa estructura en las manos de Mary Earps, la mejor arquera del Mundial, que se encamina a ser Guante de Oro. ¿Se habra arrepentido la marca que las auspicia de haber decidido no vender su camiseta de arquera para esta Copa del Mundo?
Inglaterra enfrentará a España, otra de las enormes potencias mundiales, en la final del domingo en el Stadium Australia. Las Lionesses tienen con qué ser campeonas y sueñan con una vuelta 57 años después.