Nadie imaginaba que un pedazo de papel firmado en el 2000 por el club de tenis Pompeia cambiaría para siempre la historia de la selección Argentina o del Fútbol Club Barcelona. Sigue la guerra por un servilleta firmada por Lionel Messi que ya se encuentra tasada en 300.000 libras y que divide al entorno del conjunto culé. Muchas versiones alrededor de donde debería pasar el resto de sus días.
Hablar de dicho ítem supone recordar el primer ‘documento’ con la firma de Messi para cerrar su llegada a Barcelona. Una reliquia en todos los sentidos y que Barcelona ha trabajado durante años para tenerla en su museo por el Camp Nou. Es ahí donde chocan Horacio Gaggioli como intermediario de la operación que llevó a La Pulga a Cataluña y José María Minguella, asesor de fichajes de la entidad cuando un tal Lionel Andrés aparecía en el horizonte. El primero ha sido el dueño de una pieza de la historia blaugrana que debió salir a subasta por la casa Bonhams el pasado 2 de abril. Todo quedó suspendido por diversas acusaciones.
“No permitiremos que la servilleta de Messi se subaste. Tiene que estar en el Museo del Barça”, ha declarado en varias ocasiones el entorno de Minguella. Aboga que es un documento que pertenece al club (así como a su figura y a Carles Rexach como otra parte de la operación), que no debe entrar en manos de terceros y que solo la entidad debería sacar rédito económico de esta. La defensa de Gaggioli llega en Relevo. Ahí asegura que en más de una ocasión ofreció su venta a la directiva de Sandro Rosell y que este rechazó cualquier acuerdo.
“Ahora está aprovechando la visibilidad mundial de la venta para mantener y aumentar su caché en radio y televisión a costa de la verdad”, cierra Gaggioli sobre un documento que lleva en su poder desde diciembre del 2000. La polémica se encuentra instalada y en manos de abogados a la espera de novedades en la casa Bonhams. Tanto Horacio como la propia compañía de subastas han pedido a los Minguella que declaren ante notario lo que dictan por las redes sociales o medios. De momento no hay respuesta afirmativa del otro bando en este sentido.
Barcelona se vería beneficiado en caso de quedarse con la pieza en sus instalaciones. A día de hoy y mirando los precios oficiales en su web, la entidad cobra un promedio de 15 euros a cualquiera que quiera visitar su museo. Cada 12 meses más de 1.3 millones de personas se acercan según datos del club a un recorrido donde la servilleta de Messi tendría un lugar especial como reservado en el recinto. Sigue la batalla legal por el documento que firmado en un club de tenis, cambió para siempre la historia del fútbol mundial. Varios portales han confirmado el interés de la institución por recuperarla.
¿Qué dice la servilleta de Messi?
“En Barcelona, a 14 de diciembre del 2000 y en presencia de los Sres. Minguella y Horacio, Carles Rexach, secretario técnico del FC Barcelona, se compromete bajo su responsabilidad y a pesar de algunas opiniones en contra a fichar al jugador Lionel Messi siempre y cuando nos mantengamos en las cantidades acordadas”, dicta el escrito sobre un pedazo de papel que 24 años más tarde divide a las partes de la operación.
El récord que busca la subasta de Messi
La puja iniciará en caso de luz verde en 350.000 libras. Se busca llegar a los 4.4 millones de libras que la casa Bonhams tiene como récord. ¿El adversario en este sentido? Un coche Simplex de 1912 y previo a la Primera Guerra Mundial. Es el techo a superar cuando los abogados de la trama lleguen a un acuerdo.
Encuesta ¿Crees que Messi volverá algún día a Barcelona?
¿Crees que Messi volverá algún día a Barcelona?
YA VOTARON 43 PERSONAS