En la definición del Grupo F, Atalanta y Villarreal se iban a enfrentar en el EstadioGewiss por la segunda plaza de la zona de cara a los octavos de final de la Champions League. Manchester United, que cerraba ante Young Boys, ya había abrochado la primera posición.
Un empate al Submarino Amarillo le bastaba para meterse en la siguiente instancia del torneo de clubes más importante de Europa por ubicarse un punto por encima de los italianos. Sin embargo, el duelo iba a ser reñido y sobre la mesa estaba, incluso, la posibilidad de quedar fuera también de la Europa League.
Todo estaba dispuesto para un verdadero partidazo, pero los problemas florecieron mientras se acercaba la hora. Una intensa nevada sobre Bérgamo no cesaba y el estadio estaba completamante blanco. Los trabajadores del club trabajaron y el duelo se aplazó para 20 minutos después del incio previsto.
Llegó el momento del arranque del encuentro a la nueva hora señalada, pero las condiciones no mejoraron y la UEFA optó por suspender el partido hasta el jueves. Los equipos tendrán que esperar 24 horas más para conocer si estarán entre los 16 mejores de la Champions League.
