La polémica por la triple fecha de Eliminatorias sudamericanas está lejos de terminar. Luego de que LaLiga anunciase junto a sus clubes que no prestaría a los jugadores de CONMBEOL para los compromisos que arrancan esta tarde, FIFA devolvió el golpe asegurando que los equipos estaban obligados a ello. Como respuesta, desde el máximo ente del fútbol español propusieron suspender dos encuentros cargados de latinos que en de momento, no van a cambiar sus fechas.

Desde la Real Federación Española de Fútbol confirmaron esta mañana que los partidos Villarreal vs. Deportivo Alavés y Sevilla vs. Barcelona por la cuarta fecha del campeonato mantendrán sus fechas para el fin de semana del 11 de septiembre. El inicio de la Champions League los días posteriores bloquea cualquier chance de reacomodar el calendario. ¿Y ahora?

 

Medios como MARCA aseguran que desde la RFEF están de acuerdo con la postura de la FIFA y no ven motivos de fuerza mayor para aplazar dos encuentros donde si bien varios latinoamericanos tendrán que quedarse por fuera, los cuatro clubes cuentan con suficientes futbolistas para afrontar una convocatoria de 16 jugadores, el mínimo en España para una competición oficial.

Los sudamericanos que se perderían

Gerónimo Rulli, Gonzalo Montiel, Juan Foyth, Marcos Acuña, Alejandro Gómez, Pervis Estupiñán y Ronald Araujo se perderían de momento los encuentros de la cuarta fecha de LaLiga. Producto de los estragos de la pandemia, CONMBEOL se ha visto en repetidas ocasiones obligada a moldear un calendario rumbo a Qatar 2022 que no aguanta más modificaciones. Desde Luque no cambiarán su postura y desde la RFEF, tampoco.

“LaLiga manifiesta su absoluta disconformidad ante la Resolución de la Presidenta del Comité de Competición, dictada por delegación del Presidente de la RFEF, de desestimar las solicitudes de aplazamiento presentadas tanto por el Villarreal CF respecto al partido Villarreal CF – Deportivo Alavés fijado para el sábado 11 de septiembre” , dicta el comunicado del máximo ente del fútbol profesional en España. Avisan que impugnarán la medida.