Al Real Madrid se le acabó la temporada de manera anticipada con la goleada que padeció ante el Manchester City en el Etihad Stadium (fue 4 a 0 con dos tantos de Bernardo Silva, Eder Militao en contra y Julián Álvarez) en el segundo partido de la Semifinal de la UEFA Champions League, por lo que ya está volcado al mercado de pases que abrirá la temporada 2023/2024.
En ese sentido, ya van surgiendo, por un lado, los primeros nombres del elenco -que seguiría comandando Carlo Ancelotti– que serían transferidos y los que no renovarían sus contratos próximos a vencer y, por el otro, los probables fichajes que se añadirían a un plantel que buscará, como objetivo principal y una vez más, la decimoquinta conquista continental.
En lo que a refuerzos del Real Madrid se refiere, si los trascendidos tuvieran su campeonato, los nombres de Jude Bellingham, Kylian Mbappé y Dusan Vlahovic, son los que se mantienen como líderes de una hipotética tabla. Pero en las últimas horas surgió un nuevo candidato que se perfila para adjudicarse el protagonismo, el cual, a caso, está muy al alcance de la mano de la Casa Blanca.
Se trata de Brahim Díaz, quien estuvo a préstamo en el AC Milan. El volante español fue de los puntos más altos del conjunto de Stefano Pioli en una temporada que, si bien en estadísticas no se puede considerar mala, cayó en la Final de la Supercopa de Italia y en la Semifinal de la UEFA Champions League con su clásico rival Inter de Milán y en la Serie A, por el momento, solo le alcanza para adjudicarse el pase a la Europa League.
El malagueño de 23 años debería retornar a Madrid para la campaña que viene y su continuidad depende de Florentino Pérez y compañía. O confían en él para el nuevo modelo de equipo o aceptan los 25 o 30 millones de euros (por el momento trascendieron esas dos cifras) que pretenden ofrecer desde el Rossonero para hacerse definitivamente con los servicios del protagonista.