La ilusión estaba más latente que nunca. Boca buscaba un refuerzo de extrema jerarquía para poder ir detrás de la séptima conquista de América y, de una buena vez por todas, obtener la CONMEBOL Libertadores. Por eso mismo, Juan Román Riquelme estaba gestionando el arribo de Arturo Vidal.
El mediocampista chileno quedó con el pase en su poder después de que no renovara su contrato en Inter de Milán, y tras recibir la jugosa oferta del Xeneize, además de que escuchara al vicepresidente azul y oro mediante un llamado telefónico, definió qué será de su carrera.
Por las calles del barrio porteño de La Boca eran muy optimistas con la negociación. De hecho, el primo del ex Juventus y Barcelona fue muy criterioso: "Hay un 70% de que se haga lo de Boca. La semana que viene debería resolverse", aseveró Gonzalo Vásquez en diálogo con Radio La Red. Y cuando todo creía darse en favor del equipo dirigido por Sebastián Battaglia, llegó la peor noticia de todas.
El periodista italiano Fabrizio Romano, especialista en el mercado de pases, aseveró que "Flamengo se acerca a Arturo Vidal como próximo fichaje". Además, explicó que hay "conversaciones en progreso sobre el contrato de 18 meses". Si bien en La Ribera le ofrecían un vínculo por tres temporadas, con la posibilidad de extender por un año y medio más, el ex Colo-Colo jugará en el equipo de Río de Janeiro. Un gran dolor de cabeza para Riquelme.
