En su llegada a Boca como entrenador, Jorge Almirón no tardó en detectar que muchos de los referentes y futbolistas con mayor experiencia del plantel no estaban rindiendo a la altura de la exigencia que siempre demanda defender una camiseta tan pesada y como primera medida comenzó a subir a muchos juveniles a entrenar con el equipo.
Entre todos ellos, favorecido además por la lesión de la que se está recuperando Frank Fabra, quien no tardó en ganarse un lugar entre los titulares fue Valentín Barco, quien ante Racing acumuló su cuarto partido consecutivo alineando desde el inicio y ya empezó a ganarse la bendición de los hinchas Xeneizes.
El jugador con el que Javier Mascherano espera poder contar en la Selección Argentina que este mes disputará el Mundial Sub-20 en el país ya se convirtió además en un valor de interés para equipos del extranjero. De hecho el City Group, que tiene en Manchester City a su principal apuesta deportiva, tiene el deseo de comprarlo a mediados de año.
Entre tanto que le está pasando tan rápido con Valentín Barco hay quienes se suben de inmediato a la tendencia y quienes por el contrario temen que sea demasiada presión para un futbolista de tan corta edad y que hasta hace un par de meses ni siquiera se sentaba en el banco de suplentes.
Carlos Moya, exlateral izquierdo de Boca y actual entrenador, no dudó en expresar su preocupación al respecto en diálogo con Boca de Selección: “Barco es un futbolista con mucho futuro. Pero me preocupa que asuma muchas responsabilidades a su edad. Las responsabilidades las tienen que tener los jugadores más grandes”, señaló.
Por otro lado, opinó que Riquelme y el Consejo de Fútbol estuvieron acertados en ir a buscar a Jorge Almirón como entrenador: “Ojalá pueda encontrar lo que busca y tenga tiempo. Si tiene suerte, Boca va a tener técnico para mucho tiempo. Almirón tiene nuestra idiosincracia, es competitivo y trabajador”, remarcó.







