Pasó poco más de un mes, pero en Argentina se sigue hablando como si hubiese sido ayer del empate de Boca ante Auckland City por el Mundial de Clubes. Claro, como el Xeneize sigue inmerso en una mala racha que ya existía desde aquella paridad contra el amateur equipo de Nueva Zelanda, está a la orden del día el recuerdo de esos 90 minutos en Nashville, que terminaron dejando a los de Miguel Russo eliminados en primera ronda.
En tierras oceánicas, la realidad resulta totalmente contraria. Así lo destaca Sebastián Ciganda, el arquero uruguayo que milita las filas del Auckland City y que fue suplente en el empate con Boca destacó cómo se vive el histórico partidos jugado en el Mundial de Clubes en un país mucho menos futbolero que su Uruguay natal, o que Argentina. En exclusiva con BOLAVIP, Ciganda retrató los recuerdos de aquel compromiso.
Sebastián Ciganda, uruguayo que juega en Auckland City (@sebciganda en Instagram)
-¿Cómo está el equipo después del Mundial de Clubes?
Acá se volvió un poco a la realidad después de esa locura. En mi caso, volví a laburar con lo que estaba, que es en el mantenimiento de piletas. Y en cuanto a Auckland, volvimos golpeados porque hubo varios jugadores volvieron lesionados. Jugamos dos partidos acá y perdimos ambos, y ahora jugamos contra el puntero y tenemos la chance de sacarle tres puntos para intentar meternos en la zona de clasificación.
-Cuándo volvieron, ¿Cómo fue la repercusión de su rendimiento en el Mundial?
La verdad que muy tranquilo. No había nadie en el aeropuerto para recibirnos, la verdad que era tal como se preveía. Fue volver y que todo esté normal, pero el primer partido que tuvimos en la liga fue de visitante y ahí si unos pares nos felicitaron por lo que hicimos en el Mundial. En el día a día, lo que hicimos no tuvo la repercusión que sí hubo en otras partes del mundo y sobre todo en Argentina por el partido contra Boca.
-Eso te iba a preguntar. Acá hubo mucho revuelo por el empate con Boca, ¿En Nueva Zelanda como cayó?
Pasó todo bastante desapercibido. Tengo varios amigos en Sudamérica que me mandan mensajes de que todavía se habla por allá del partido por la mala racha que atraviesa Boca ahora. Fue algo histórico, pero acá todavía no se le da esa magnitud. Acá hay una comunidad importante de sudamericanos y sí, ahí se habla mucho del tema. Pero en Nueva Zelanda en general no mucho. Como que ya pasó.
– ¿Y entre el plantel de Auckland lo siguen viviendo a menudo?
Nosotros seguimos sin poder creerlo. Cuando hablamos del tema lo vemos irreal. Era lo que queríamos pero no entendemos todavía lo que pasó. Era muy difícil de lograrlo, y creo que con el tiempo va a ir tomando más y más importancia, sobre todo acá. Un empate contra Boca no es algo de todos los días para un equipo amateur. Igualmente, ahora nos toca enfocarnos en la liga de acá, que estamos complicados.
-Boca ahora atraviesa un muy mal momento: ¿Creés que fueron un factor importante para esto?
Si, pero creo que son momentos. Boca había hecho las cosas bien contra Benfica y Bayern y con nosotros bajó un poco el nivel. Puede ser que eso le haya afectado, no sé como es la realidad de los jugadores allá, pero quizás les afectó anímicamente. De todas formas, creo que lo que más le afectó a Boca es la repercusión que hubo, más que el resultado. Todo el mundo habló de la noticia y a todos los jugadores les llega constantemente que no pudieron ganarle a un equipo amateur.
–Pega en el ego…
Claro. A nosotros nos pegó para arriba y a ellos los hundió.
-¿Boca sobró el partido con Auckland?
No creo. No se notó. Me parece que bajaron el nivel porque tuvieron que adaptarse a otro tipo de partido. Contra Benfica y Bayern jugaron de contra y les salió bien. Con nosotros tuvieron que tener el protagonismo del juego, les dimos la pelota y no hicieron mucho más que tirar centros. Justo eso es algo que teníamos súper entrenado durante el Mundial. A nosotros se nos hizo cómodo el partido.
-¿Hablaste con alguien de Boca?
No. Después del Mundial no, pero tengo el número del hermano de Cavani y hablé con él después del partido. Le agradecí porque él me puso en contacto con Edi durante el Mundial. Me hizo llegar su camiseta también. Justo vi que el otro día se le abrió el arco a Cavani, que a mi como uruguayo eso me pone contento.
-¿Te quedaste con algo más además de la camiseta de Cavani?
Nos dieron una medalla, tengo las camisetas que intercambié, que fueron las de Neuer, Trubin y Cavani, más las de algunos compañeros que me las regalaron. Las mías también, pero ahora se las voy a mandar a Uruguay a mi familia.
-¿Los jugadores de Auckland te preguntaron algo sobre la hinchada de Boca?
Todos quedaron como locos. Les había mostrado videos para que se preparen, y los veíamos en miami y en Nashville. Cuando estábamos en el banco me preguntaban por la hinchada en sí y me pedían que les traduzca las canciones. Incluso, después del partido, seguían impresionados con el gesto de la mano acompañando las canciones y hasta se sumaron a cantarlas después del empate.
-En una palabra, ¿Cómo definirías el partido contra Boca?
Irrepetible.
-Siendo uruguayo, y más allá de tu fanatismo en Uruguay, ¿Te tira algún equipo del fútbol argentino?
Tengo varios amigos de Estudiantes de La Plata y hay buena onda con Peñarol, así que el Pincha me tira un poco en Argentina. Cuando viajé a Uruguay en abril aproveché para ir a La Plata también y fui al UNO. Acá en la isla, los hinchas de River que hay me joden con que soy bostero, pero no. Solo los jodo un poco a los de River, pero ahora que ellos bancan más al Auckland está todo bien. Solo con chicanas y buena onda.
-Hablando de vos y de tu rutina, ¿Cómo es tu día a día en Nueva Zelanda?
Vivo en una comunidad con bastantes sudamericanos, en la isla de Waiheke. Está a 40 minutos de Auckland en Ferry. Mis semanas son bastante movidas, porque trabajo y entreno. Ahora que se termina el invierno vuelvo a trabajar con las piletas. Hago mantenimiento de piletas. Termino mi jornada de laburo a las 3 de la tarde y me voy a tomar el ferry para entrenar, que tengo tres horas de Waiheke a la cancha. Entrenamos hora y media o dos horas por día y me vuelvo a mi casa. Es un esfuerzo bastante grande, pero es lo que elijo y se vive de manera muy cómodo.
-¿Te tienta salir de ahí y jugar en otra liga o te ves en Nueva Zelanda toda la vida?
La verdad que si, me gustaría probar en otra liga. Más profesional. Acá estoy muy cómodo, pero ante un llamado de algún equipo analizaría mi futuro. Me llamaron de Uruguay algunos equipos, un agente en realidad que quería ver si algún equipo de allá me pretendía. Nada concreto tampoco. Acá se maneja un ritmo de vida muy cómodo, así que no me molesta.
