En el día de ayer, la FIFA finalmente dio su veredicto final por el reclamo que interpuso la ANFP al ente rector del fútbol mundial por la irregular inscripción del jugador Byron Castillo y desestimó los reclamos chilenos.
La entidad presidida por Gianni Infantino no tomó en consideración la extensa investigación del abogado brasileño Eduardo Carlezzo y mantuvo a Ecuador en el Mundial de Qatar 2022 y a la Selección Chilena sin pan ni pedazo tras no haber podido conseguir su boleto en cancha.
En conversación con el portal de noticias argentino, Olé, José Massú Espinel, abogado del jugador ecuatoriano, aseguró que en la arremetida chilena “Pretendían desconocer a tres instituciones gubernamentales. Si hubieran venido a Ecuador a averiguar cómo eran las cosas, nunca hubieran hecho la denuncia”, dijo en primera instancia.
Bajo esa misma línea, complementó diciendo que “La FIFA y el TAS son entidades deportivas y jamás podían haber desconocido a instituciones ecuatorianas. Chile pretendía pasar por encima del Ministerio del Interior, que le ha dado un pasaporte a Byron; al Registro Civil que le dio su partida de nacimiento y su documento y los fallos de los jueces constitucionales”.
El jurista sigue con sangre en el ojo por el perjuicio ocasionado a su representado y alzó la voz con dureza: “Chile basó su reclamo en redes sociales y documentos falsos. Sacaron partidas de nacimiento de un homónimo, pero que se escribe Bayron, con a, una persona nacida en Colombia. Realmente metieron la pata y se han ganado el repudio de mucha gente a nivel mundial por un reclamo que nunca tuvo razón de ser”, cerró.
Lo cierto es que la FIFA falló a favor de Ecuador y desestimó el reclamo chileno, pero el abogado brasileño que lleva la demanda chilena, Eduardo Carlezzo, ya anunció que agotarán todas las instancias para tratar de meter a Chile en la cita planetaria aunque sea por el escritorio.