Wimbledon 2025 se viene con todo. El tercer Grand Slam de la temporada, y el único en superficie de hierba, donde los fanáticos del tenis esperan que la rivalidad entre Jannik Sinner y Carlos Alcaraz viva un nuevo histórico capítulo.
Para la edición 2025, el torneo que se disputa año a año en el All England Lawn Tennis de Londres decidió aumentar considerablemente el monto de los premios a repartir entre los tenistas participantes, convirtiéndose en el Grand Slam mejor pagado de la historia.
Desde el 30 de junio al 13 de julio, el Major británico repartirá un premio total de 53,3 millones de libras esterlinas (algo así como 73 millones de dólares), lo que equivale a un aumento del 7% respecto al año anterior y prácticamente el doble de lo que entregaba hace diez años.
Por ejemplo, el campeón se llevará casi 4 millones de dólares, mientras que sólo por participar en la primera ronda el premio será de 66 mil libras (unos 90 mil dólares).
El aumento de premios viene de la mano con una carta que en el mes de abril firmaron los mejores tenistas del ATP y WTA, donde exigían un aumento de repartición considerando los millonarios ingresos que generaban los 4 grandes torneos. Los ingleses tomaron nota, y este jueves, Wimbledon oficializó el incremento en el botín.
Cambios históricos en Wimbledon 2025
Pero no será lo único novedoso de este Wimbledon, ya que la organización del certamen anunció un cambio histórico en la programación de todas las finales, ya que su inicio se retrasará en dos horas respecto al histórico horario habitual.
Para el día sábado 12 de julio la final de dobles masculino quedó programada para las 13:00 horas local (8:00 horas de Chile), seguida de la final individual femenina (11:00 horas de Chile). En tanto, para el día domingo 13, la final del dobles femenino quedó fijada para las 13:00 horas y la individual masculina a las 16:00 de Londres (11 am de Chile).
Dichos horarios implican otros cambios. Por ejemplo, si la final masculina se extiende por más de 5 horas como lo fue la de Roland Garros, aquello implicaría cerrar el techo de la cancha central, lo que obligaría a una pausa.
Además, este será el primer Wimbledon con tecnología electrónica lo que significa eliminar a los jueces de línea. Por último, la organización descartó sumar un día más a su programación como ya lo han hecho Roland Garros, US Open y el Abierto de Australia.
