Sábado 15 de octubre de 2022. Una agitada mañana tuvo el plantel de Universidad de Chile que por esas horas gozaba de haber eliminado dos día antess a Universidad Católica de Copa Chile en su ronda de cuartos de final.
Razón potente para sonreir, más aún que la salvación parecía estar cerca luego de haber derrotado a Deportes La Serena como visita y prácticamente, lograr la permanencia en primera división.
Pero ese sábado todo se vino abajo con la fuerte pelea entre el portero Cristóbal Campos Véliz y el atacante Ronnie Fernández, quien por esos días era el capitán del equipo. Un duro encontrón donde tuvieron que intervenir otros futbolistas y el propio técnico Sebastián Miranda, quien días después salió a dar la cara ante tal situación, por su parte a los jugadores nunca más se les escuchó.
Dichas diferencias, hasta el día de hoy no son resueltas y fue así como la semana pasada en la foto del equipo antes de enfrentar a Unión Española en Talcahuano, Campos estando al lado del ex Wanderers, por lo menos existe un metro de diferencia entre uno y otro siendo que se encuentran al lado.
Camarín trastocado, jóvenes confundidos y dolidos por la situacióny prueba de ello fue que el equipo nunca más ganó. Empates ante Everton y Unión Española por la semifinal ida y caídas frente a Huachipato de manera estrepitosa y a los propios hispanos por la revancha en Copa Chile, son el panorama oscuro de la U.
Cristian Palacios no anotó más, el equipo por su parte completa341 minutos sin convertir un gol, Darío Osorio decayó y a eso sumar el caso fortuito de la lesión de Nery Domínguez, quizás y pese a los pocos partidos jugados, es el jugador más rescatable de la U modelo 2022.
A eso añadir, que la situación protagonizadapor Pablo Aránguiz, también cae en este análisis dando cuenta de los días turbulentos que ha debido sortear el técnico, Sebastián Miranda y sus jugadores. Panorama desalentador de una temporada escrita en azul que finalizará este sábado cuando reciban a Cobresal en el Huachipato CAP y que se realizó con unlápiz con muy poca tinta.