A casi nueve años del título de la Selección de México Sub 17, donde el Tri venció a Uruguay por 2-0, pocos referentes de ese equipo quedan en actividad, incluyendo a uno que hizo soñar a todo el país: Julio Gómez, mejor conocido como la "momia", que con una extraordinaria media chilena en las semifinales ante Alemania hizo un gol que reventó las gargantas de toda la afición azteca y les hizo imaginar un futuro lleno de éxito para el joven jugador. Pero se equivocaban.

"Cuando eres joven y no tienes los pies sobre la tierra a lo mejor sí, en mi mente pasaba que ya había logrado todo y la verdad es que no, faltaba un recorrido grande. No solo era ser campeón del mundo, sino hacer una carrera en Primera y consolidarme”, comentó Gómez en exclusiva a Mediotiempo. Y es que el jugador de 25 años no supo manejar la fama y su carrera perdió rumbo tras la hazaña con el Tri.

Pese a que la Momia reconoce su parte en el traspié de su carrera, también cree que en sus tiempos de juventud no habia tanto respaldo a los que recién comenzaban: “Conforme pasó el tiempo me estaba moviendo mucho de equipo y ahí ya me cayó el veinte que había dejado pasar una gran oportunidad. Suele pasar mucho, a lo mejor no tenemos el apoyo, alguien que te esté guiando. Ahorita en la actualidad ya hay más psicólogos en los clubes para no darles tanta luz (a los jóvenes), tantas entrevistas”. 

Hoy, sin club y sin ofertas a futuro, Gómez no se rinde y asegura que quiere su desquite en el futbol: “Tengo esa espina clavada, de tener mi revancha futbolística. Sé que va a llegar y debo estar lo mejor preparado para que llegue, no sé si sea en Ascenso, la nueva liga que se va a abrir o en Primera División, pero de que va a llegar, va a llegar”, aseguró.

La Momia hizo historia para el balompié mexicano, y lo sabe, pero sueña con enmendar su rumbo y que más adelante la afición lo recuerde por mucho más que aquel gol a Alemania, y pese a que la desaparición del Ascenso MX fue un duro golpe a sus pretensiones, el volante espera ansioso su revancha.