No cabe ninguna duda de que Tigres UANL se transformó en el mejor equipo de la última década en el futbol mexicano. Esto se debe en gran parte al enorme trabajo de Ricardo Ferretti, la calidad de sus planteles y la mentalidad ganadora de la institución. Además, claro está, del labor que hace la directiva desde su lugar.
Es justamente Miguel Ángel Garza, presidente del club, quien tiene mucho que ver con el excelente pasar de los Felinos en los últimos años. El directivo, además, tiene una historia bastante particular ya que su llegada a los Regios se dio de manera curiosa y hoy tranquilamente podría estar en otro equipo.
Garza reveló en una entrevista al club que tenía firmado un contrato con dos clubes para ser dirigente allá por 1998, pero apareció Tigres y lo convenció rápidamente. “Tengo un llamado para dirigir a manejar a Morelia y Veracruz que eran de Azteca, del señor Álvaro Dávila. Nolo conocía y me habla para manejar a los dos equipos, firmé con ellos, faltaban dos meses para agosto”, explicó.
Más adelante señaló: “En ese entonces Memo Martínez que era el presidente de Tigres, en una junta de presidentes Álvaro le pregunta que si me conocía y dice que sí, y Memo le dijo que no creía que me fueran a soltar.Memo me habla:‘¿cómo te vas a ir?’, yo les decía que no había firmado y me dice: ‘nosotros tenemos intenciones que te vengas a Tigres’ y le dije: ‘sabes que, sí firmé, ya di mi palabra’ y me dijo que lo dejara arreglar”.
“Les dice que si me dan oportunidad de venirme a trabajar primero acá… en el 98 empiezo a trabajar en Tigres. Yo lo que siento es que al final tienes que trabajar y dar el máximo. Soy un trabajador más que se vino a partir la madre todos los días por conseguir lo que creo se debe conseguir en un equipo”, sentenció Miguel Ángel.