Con el cotejo contra Hoffenheim empatado en 1 y a poco de cumplirse el minuto 80, Marcus Thuram, a instancias del VAR, recibió la roja directa por un acto más que desleal: el jugador del Borussia Mönchengladbach, en plena discusión con Stefan Posch, decidió escupirle en la cara al mismo.

En plena pandemia mundial y con la cuestión del coronavirus aún situada en una posición sensible en la que todos siguen haciendo sus correspondientes esfuerzos para no contagiarse, la actitud de Marcus no fue pasada por alto ante la atenta mirada de los directivos de la institución.

Aplicándole un duro castigo desde el lado institucional, Max Eberl, director deportivo del Mönchengladbach, dialogó con el sitio web del club y dejó en claro que ya se acordó con el jugador la sanción que recibirá por su accionar.

"Como club le pondremos una sanción equivalente al salario de un mes por su comportamiento, el cual será donado para una buena causa. Marcus aceptó y se ofreció a comprometerse con causas sociales", manifestó el directivo del cuadro alemán para el que Thuram juega desde mediados del 2019.