Saúl El Canelo Álvarez lo había dejado muy claro en diciembre del año pasado, luego de vencer a Callum Smith en decisión unánime y arrebatarle los títulos de la AMB y el CMB en las 168 libras. Quería ser el campeón mundial indiscutible de la división antes de despedir 2021 y no iba a distraerse con nada en el camino.

Tuvo que tomar una defensa obligatoria con Avni Yildirim en febrero que resolvió sin despeinarse. Luego sí pudo enfrentar a Billy joe Saunders para quitarle el cinturón de la OMB y este sábado, en el MGM Grand Garden Arena de Las Vegas, hizo lo propio con Caleb Plant para sumar el título de la FIB y lograr su cometido.

Y si bien en la rueda de prensa posterior a su coronación histórica dijo que era tiempo de tomar un breve descanso para recuperar energías, todos los peleadores que habían quedado en lista de espera saben que tendrán más chances de negociar una pelea con el tapatío de las que tuvieron este año.

Entre quienes ya alzaron la mano se destacan David Benavídez, Jermall Charlo y también Anthony Dirrell, quien peleó y noqueó anoche mismo en el combate coestelar. Pero quien se roba todas las miradas es Gennady Golovkin, quien ahora sí podría saldar la deuda pendiente y tener una trilogía ante Canelo.

En rueda de pensa, el flamante campeón mundial indiscutible no descartó la posibilidad de hacer ese combate el año próximo siempre que las negociaciones cumplan con sus expectativas. Por ahora no parece tener intenciones de subir a la división de peso semipesado y esa es una buena señal para el kazajo.