Antes que nada, se peina, se plancha con las manos su cabello hacia adelante para dejar impecable el peinado que tanto lo caracteriza, y por el que fue distinguido como todo un personaje de caricatura, la imagen de su playera es el perfecto ejemplo de su personalidad, de su carisma y de la alegría que llegó a darle al vestidor de Cruz Azul, pues es Woody de Toy Story quien lo acompaña para la ocasión; entonces, se acomoda en su lugar desde el otro lado de la pantalla y ahora sí, el Campeón está listo para brindar la entrevista a distancia: José Joaquín Martínez sonríe y comienza a recordar el histórico 30 de mayo del 2021.
“Contento, feliz, lo imaginábamos al principio del torneo, lo platicábamos y nos trazábamos objetivos, pero jamás pensamos que se fuera a dar como se dio, rompiendo algunos récords”,‘Shaggy’ Martínez.
El ‘Shaggy’corriendo por la cancha del Estadio Aztecaabrazando a sus compañeros, con esa sonrisa gigante que ha patentado como parte de su identidad y repartiendo uno que otro zape, como ya se ha vuelto toda una tradición en el equipo cementero desde que llegó, hace exactamente un año, y que a su vez es el reflejo de un vestidor fortalecido y consolidado, que trabaja en un ambiente de hermandad, competitividad y hambre de ganar, todo esto liderado por un hombre de disciplina y exigencia máxima: Juan Reynoso.
Y es que en realidad ese fue el momento que marcó la historia, la llegada del estratega peruano, lo sabe el ‘Shaggy Martínez y lo destacó como piezafundamental del proceso que tuvo que pasar Cruz Azul hasta lograr conquistar la novena estrella, cuando en diciembre todo en La Noria era tragedia y casi seis meses después se transformó en gloria.
Así, el lateral nacido en la Ciudad de México, quien tuvo que pelear durante toda la temporada por ganarse un lugar en la cancha y con el deseo de firmar la renovación de su contrato para permanecer en el club que le dio el segundo título de su carrera, compartió las claves dentro del vestidor que llevaron al equipo cementero a consagrarse como el Campeón del futbol mexicano, después de 23 años de no lograrlo.
¿Cómo tomaron los jugadores la llegada de Juan Reynoso como director técnico?
“Sin duda, el profe fue una pieza fundamental para que Cruz Azul fuera Campeón. Nosotros nos enteramos la semana que inició el torneo, el lunes que llegó y se presentó; uno como profesional tiene que trabajar esté quien esté, te tienes que adaptar, y gracias a Dios llegó el profe porque la exigencia que tiene es muy alta, el Puebla del profe Reynoso jugaba muy bien y le peleaba a cualquiera, seguro pasó porque les exigía toda la semana, porque todos le responden en la cancha”.
¿En qué momento comenzaron a creerle a Juan Reynoso que podían hacer historia?
“Nos juntó a principios de torneo, nos comentó eso, que podíamos ser un equipo de época y conforme pasaron los partidos, en la fecha 10, 11, que el equipo seguía sin perder y gane y gane partidos empiezas a creer en uno mismo, en el trabajo de todos los días, en los compañeros, en el profe”.
¿Cómo se cambió el chip desde adentro después de la trágica eliminación en diciembre?
“Nos costó mucho, llegó el profe, no hicimos pretemporada, fue muy rápido todo, no nos dieron tiempo de llorar eso y empezamos a trabajar, fue muy importante que el profe te exija todos los días, porque se te olvida lo que pasa en un partido, al final esa competencia, esa exigencia que el profe generó mentalmente te va preparando para estar siempre lo mejor posible, físicamente, anímicamente, en todos lados.
“Sin querer o queriendo mentalmente vas agarrando fuerza de decir quiero estar jugando, quiero aportar, quiero ser parte de la historia; todo eso va generando que los 22 jugadores queramos estar dentro y hacerlo lo mejor posible, eso lo generó el profe y los jugadores en la cancha, pero todos los días y es gran parte del éxito de Cruz Azul hoy en día”.
“Fue un cambio de chip, en un proceso de menos a más, a todos los que participamos en CU nos dolió en el alma, a toda la afición sin duda alguna, porque lo decían en redes sociales, lo comentaban en la calle; pero ese equipo en particular tocó fondo, y cuando estás en el fondo solo puedes ir para arriba”.
¿Cómo se adaptaron al estilo de Reynoso y a sus rotaciones?
“Bien, siempre positivo, esa competencia genera que tú estés mejor y que te superes todos los días, también importante que no te relajes, porque pasa en otros equipos que juegan siempre los mismos y llega un momento en que se relajan y ya no está esa competencia, esa exigencia en la fecha 12, 13 y por ahí se desinfla el equipo llegando a Liguilla.
“Eso que hizo el profe fue espectacular y todos mis compañeros tomamos a bien esa competencia, y también importante que el ambiente en el grupo siempre fue positivo; jugara quien jugara siempre estábamos contentos apoyando al compañero, exigiéndole, exigirnos entre nosotros adentro de la cancha, en los entrenamientos, los interescuadras eran apretadísimos, pero todo eso lo genera la competencia, tener esa ilusión de entrenar bien para jugar el fin de semana”.
¿Te sentiste cómodo jugando como carrilero con las exigencias que implicaba el esquema de Reynoso?
“Sí, bastante contento, cómodo con las oportunidades que me dio, con línea de cinco, de cuatro, espectacular, es sumar lo que uno pueda aportar al grupo, obviamente que a todos nos gusta dar un pase de gol, un centro de gol o hacer el gol, pero algunos jugadores tenemos roles diferentes a eso y tenemos que adaptarnos, pero sí, se divierte uno más arriba generando cosas importantes para el equipo”.
Shaggy llegó a darle una alegría extra al vestidor de Cruz Azul, ¿cómo era el ambiente al interior?
“El ambiente en el vestidor desde que llegué hasta el día de la Final siempre fue alegre, positivo, a pesar de situaciones que no fueron las mejores en cuanto a resultados, de alegría, un poco de relajo, pero con responsabilidad, dentro del vestidor, en los entrenamientos también era pasártela bien, divertido, pero siguiendo las reglas y yendo por un camino de trabajo, de exigencia y demás, pero con una broma por aquí, otra por allá”.
“Todos en general, no es que uno destaque, todos aguantamos, todos aportamos esa alegría al grupo, en el vestidor, en la cancha, en el estadio y eso se vio reflejado en muchos partidos, en muchos festejos, en cotorreos en redes sociales, que todo eso suma para que el equipo esté bien y el ambiente sea bueno, juegue quien juegue y sea el resultado que sea, siempre y cuando se aspire a quedar Campeón”
“Lo importante del grupo, de los 25 jugadores más cuerpo técnico, porque ellos también se sumaban a esa broma, a ese molestar a alguien en cierto momento, utileros, masajistas, doctores; fue un ambiente como familia, somos muy unidos y si a alguien le pasaba algo estábamos al pendiente, cualquier situación que pasara en el torneo estábamos al pendiente y todo eso se reflejó en la cancha y es parte importante del éxito de Cruz Azul”.
¿Cómo tomaba ese relajo Juan Reynoso?
“Bastante bien, todos hicimos una amalgama muy bonita, el profe también le entraba al cotorreo, de molestar aquí, de molestar allá, de repente lo molestaban y aguantaba, pero todo con responsabilidad, había momentos, no podías estar en un interescuadras riéndote, tal vez en la pausa de un circuito, si le hicieron túnel a alguien ibas y te burlabas, o te pegaban. Nos divertimos mucho, pero siempre fue primero el trabajo y cuando había tiempo todos cotorreábamos dentro del entrenamiento”.
¿Ya dimensionaste que eres parte del equipo histórico de Cruz Azul que acabo con la sequía?
“Si uno piensa que ya logró todo o si ya hizo lo máximo en su carrera ya deja uno de trabajar, de ponerse metas y objetivos; sí lo disfrutamos, salimos de vacaciones, tratamos de ser felices, pero es importante tener los pies en la tierra para seguir trabajando y conseguir cosas importantes”.
¿Cuál fue tu reacción al momento del silbatazo final en el Estadio Azteca?
“Mi primer pensamiento fue agradecerle, que me diera la oportunidad de vivir esos momentos, y mi primera reacción fue ir a abrazar al primero que me encontrara y el primero que vi fui y salté y abracé y demás, me fui a otro lado a otra bolita y empecé a saltar, a abrazarlos, pero son sentimientos que te sobrepasan, que no sabes cómo controlarlos, por la emoción, por todo lo que genera Cruz Azul, todo lo que había sufrido el equipo tanto tiempo, uno sabe, uno tiene amigos, conocidos, primos, tíos, que le van a Cruz Azul, que estaban los memes, las burlas y se agradece que hayamos podido terminar con esa sequía de títulos”.
¿En qué lugar pones el campeonato de Cruz Azul en tu carrera?
“En lo más alto de mi vida futbolística por lo que implica, por lo que le costó tanto a la institución, al club quedar Campeón, que uno esté ahí adentro del plantel es algo histórico, es algo que va a quedar para toda la vida, Dios quiera que nos quedemos aquí y que sigamos luchando y ganando títulos para poder marcar un equipo de época y que se quede la huella de uno como jugador en una institución tan grande como es Cruz Azul”.
¿Qué cualidades tiene este Cruz Azul para ser un equipo de época?
“Hay muchas fortalezas, una de ellas es la unión que tenemos, la humildad, de que si entras o no apoyas al compañero, en las rotaciones nadie hizo caras, nadie se enojó, al contrario, se trabajó más y se mejoró en el tema individual, también que todos los jugadores tenemos hambre de quedar Campeón, de quedar en la historia, de seguir consiguiendo títulos; que es lo que queda, el día que te retires va a quedar la novena estrella en el escudo de Cruz Azul y vas a decir ‘yo aporté para poner esa estrella ahí”.
A tus 34 años, ¿te ha pasado por la cabeza una posible fecha de retiro?
“Eso del retiro depende de cada jugador, de cada posición, todos sabemos que en algún momento se va a acabar, pero mientras físicamente en lo personal me sienta bien, seguiré luchando por estar, por mí juego cinco o 10 años más, pero al final es que estés bien y que te sigan contratando, si eso no pasa prácticamente te estarías retirando; siento que físicamente podría durar tres, cuatro años, pero es paso a paso para ver cómo evoluciona todo”.
¿Te gustaría retirarte en Cruz Azul?
“Sí, claro, el retirarse en un equipo como Cruz Azul también es importante, queda en tu historia como jugador y solo Dios sabe qué vaya a pasar, pero lo que sí, hay que disfrutar cada momento”.
¿Ya estás listo para volver a la pretemporada con Cruz Azul?
“Sí, listos, preparándonos, cuidándonos para regresar lo mejor físicamente posible y con ganas de hacer cosas importantes, de volver a levantar títulos lo más que se pueda, no es fácil, pero hay que trabajarlo todos los días con la misma humildad, la misma alegría, y con esa exigencia que tuvimos y que el profe nos dio todos los días”.
¿Qué se puede esperar de Cruz Azul en el Campeón de Campeones el próximo 18 de julio?
“La exigencia es la misma, quedar Campeón, juegue quien juegue, estás en Cruz Azul y tienes que salir a ganar, a quedar Campeón, no sabemos quiénes estén y quienes no, hay que esperar y trabajar esté quien esté para conseguir cosas importantes para todos”.
