Al margen de que Max Verstappen fue el mejor piloto del Campeonato Mundial de 2022, donde obtuvo su tan ansiado bicampeonato, la Fórmula 1 puede ser analizada desde distintos parámetros. Uno de ellos, fundamental para Red Bull y todas las demás escuderías, es el plano económico.
Allí, el mexicano Checo Pérez, que terminó en el tercer lugar del Campeonato de Pilotos pero fue importante para la consagración en Constructores, le dio una gran noticia a Red Bull. El oriundo de Guadalajara fue de los más económicos, ya que su auto tuvo muy pocos autos a lo largo de la temporada.
A lo largo del calendario, fueron solo cinco inconvenientes los que Checo Pérez tuvo en 22 pruebas realizadas. En Mónaco, por ejemplo, donde ganó, tuvo un choque en la última vuelta de la Q3. El arreglo del monoplaza tuvo un costo de 327 mil dólares.
En Canadá, el mexicano rompió su ala delantera, el cual tuvo un costo de 125 mil dólares, mientras que en Silverstone, tras una lucha con Lewis Hamilton y Charles Leclerc, dañó el endplate, que costó 125 mil dólares.
El daño más costoso
Entre los accidentes que protagonizó y causaron pérdidas para Red Bull, el más grave tuvo lugar en Austria: en su pelea con George Russell, Checo dañó el piso, el alerón y la suspensión de su RB18.