El Campeonato Mundial de Fórmula 1 de 2022 sigue siendo un dolor de cabeza para Mercedes, y en especial, para Lewis Hamilton. El siete veces campeón mundial sigue lejos de encontrar su mejor versión, luego de quedarse el año pasado con un amargo sabor de boca tras perder el título en la última vuelta ante Max Verstappen. Tras dos carreras cargadas de incertidumbre, las pruebas del GP de Australia no parecen mejorar demasiado.
Lewis Hamilton habrá llegado a Albert Park con el recuerdo de haber marcado las últimas seis Poles en dicho circuito, aunque también con cierta preocupación por cómo empezó el año para Mercedes. El piloto británico terminó sexto en las primeras pruebas de este viernes, mientras que en las segundas no logró ni siquiera meterse entre los primeros diez puestos. Otro indicio de que el W13, de momento, está muy lejos de Red Bull y Ferrari.
En la jornada del viernes, Hamilton volvió a ver cómo Ferrari lideró con Charles Leclerc y Carlos Sainz, mientras que a pesar de los intentos por mejorar, Mercedes aún sigue lejos. “No hay mucho que podamos hacer, tenemos que pilotar en la forma que podamos”, aseguró el británico en diálogo con Race Fans, luego de un complicado inicio en el GP de Australia, donde el mexicano Checo Pérez terminó tercero y quinto, respectivamente.
Hamilton reconoció su desazón con el momento que atraviesa en la temporada: “Es algo frustrante, pues intentas apretar y acercarte a los mejores, e incluso cuando haces una vuelta buena, estás a un segundo y dos décimas del primero. Es complicado y nada que podamos cambiar en el coche marcaría la diferencia”, señaló. Además, afirmó que los cambios realizados hasta el momento “no parecen ser sinónimo de mejoría”.
La opinión de Russell
Por su parte, su compañero de equipo, George Russell, tampoco pudo sumar buenas sensaciones en las prácticas: terminó 12° y 11°. “El porpoising nos ha afectado mucho, cuando he llegado a la curva nueve ha sido lo más severo que he experimentado. Es algo con lo que tenemos que lidiar en este momento, pues es la forma en la que podemos ir más rápido, o quizá no lo sea. Necesitamos analizar en profundidad los datos y entender mejor el coche”, explicó.