La temporada 2023 de la Fórmula 1 no comenzó de la mejor manera para Mercedes-AMG Petronas, eso está clarísimo. Si bien el segundo puesto de Lewis Hamilton en el Gran Premio de Australia ilusiona a los fanáticos de la escudería, la realidad es que el rendimiento del W14 está muy lejos de lo mostrado por el RB19. Y será muy difícil que lo igualen.

Luego de solamente tres jornadas, el heptacampeón mundial ya se encuentra a 31 puntos de distancia de Max Verstappen; mientras que George Russell, su compañero, está a 51. Es difícil imaginar a los de Toto Wolff peléandole el campeonato a los de Christian Horner, y esto queda reflejado en las recientes declaraciones del experimentado piloto británico de 38 años.

"Soy consciente de que podría llevar mucho tiempo alcanzar un coche. Si miras a Red Bull, lo más probable es que continúe evolucionando. Aunque algunos coches se estancan en términos de rendimiento, cuando llegas a algún punto, no puedes simplemente seguir adelante. Pero tal vez se pueda, tienen un gran equipo a su alrededor, así que estoy seguro de que seguirán agregando carga aerodinámica", señaló Lewis Hamilton sobre el equipo de SuperMax y Sergio Pérez, quienes están destinados a disputarse el título.

Lewis Hamilton, preocupado por el rendimiento de Mercedes (Getty Images)

Lewis Hamilton, preocupado por el rendimiento de Mercedes (Getty Images)

Esta confesión sigue sepultando las opciones de Mercedes de poder pelear por la corona, aunque más adelante Lewis rescató: "Tenemos que asegurarnos que cuando hagamos el cambio, que con suerte no está demasiado lejos, nos lleve con seguridad cerrar esa brecha. Estoy agradecido de que estén abiertos a hacer un cambio y no quedarse atrapados con lo que tenemos".

"Hay una parte de mí que tiene la esperanza de que encontramos un truco y vayamos directamente hacia el camino correcto, que no está muy lejos de los demás. Hemos demostrado en el pasado que podemos desarrollarnos rápidamente y espero que ese sea el caso a medida que se abre el potencial del coche", sentenció Hamilton, metiendo presión para que los ingenieros de su escudería dejen el monoplaza al nivel del RB19.