Luka Doncic, estrella eslovena de la NBA que brilla en Los Angeles Lakers, dejó en claro recientemente quién es, para él, el mejor escolta de la historia del basquetbol. Durante una dinámica en la que debía elegir a los jugadores más destacados por posición, Doncic no dudó en señalar a Michael Jordan como el número uno entre los escoltas, aunque reconoció la grandeza de una leyenda como Allen Iverson, fue enfático al afirmar que el exjugador de los Chicago Bulls está por encima del resto.
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El reconocimiento de Doncic hacia Jordan no sorprende si se consideran los logros y el impacto que tuvo en la historia del deporte. Con seis campeonatos de la NBA, cinco premios al Jugador Más Valioso (MVP) de la temporada regular, seis MVP de las Finales, diez títulos de máximo anotador y catorce participaciones en el Juego de las Estrellas, Jordan construyó una carrera difícil de igualar. Esto le generó a Luka el hecho de tener que desechar de manera temprana a Manu Ginóbili, leyenda absoluta de San Antonio Spurs.
Manu Ginobili fue descartado por Doncic al elegir al mejor escolta de la NBA. (GETTY IMAGES)
El mejor escolta de la historia para Luka Doncic
Además de su impresionante palmarés, Michael es el líder histórico en promedio de puntos por partido, tanto en temporada regular (30.1) como en playoffs (33.4), una muestra clara de su dominio constante en los momentos más exigentes del juego. Su récord perfecto de 6-0 en finales de la NBA refuerza aún más su estatus como leyenda indiscutible. Ningún otro escolta ha logrado mantener un nivel tan alto con semejante consistencia en las instancias decisivas.
Para muchos jugadores actuales, Jordan sigue siendo una figura mítica. Su forma de competir, su mentalidad inquebrantable y su habilidad para imponerse en los momentos de mayor presión lo han convertido en un modelo a seguir. La admiración que Doncic expresa hacia él no solo representa respeto, sino también un reconocimiento generacional de que la influencia de MJ trasciende el tiempo y las estadísticas.
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En un panorama donde las comparaciones entre eras suelen generar controversia, las palabras de Luka aportan claridad. En medio del auge de nuevos talentos que aspiran a dejar su huella, el esloveno eligió mirar hacia atrás y reconocer al que muchos consideran el más grande de todos los tiempos. Su opinión refuerza la idea de que Michael Jordan no solo dominó su época, sino que también sigue siendo la vara con la que se mide la grandeza en el baloncesto.
