La llegada del coronavirus a México ha encendido todas las alarmas en la población, aunque las autoridades nacionales se han encargado de transmitir tranquilidad y la mayor cantidad de información necesaria posible.

Se cualquier manera, a 10 años del arribo de la influenza A H1N1 a México, los fantasmas del pasado no tardaron en aparecer y algunos se preguntan qué podría traer consigo esta nueva cepa.

Considerando lo que sucedió en Italia con la Serie A, los aficionados del futbol enseguida comenzaron a pensar en su posible impacto en el normal desarrollo de la Liga MX y la concurrencia al estadio.

La experiencia italiana, de todos modos, es considerablemente distinta a la mexicana, ya que se trata del tercer país con mayor cantidad de infectados (más de 1.100), solo por detrás de Corea del Sur (más de 3.700) y China (cerca de 80 mil). Eso los llevó a postergar algunos partidos en el norte del país (el área más afectada) y a jugar otros sin público en las gradas para prevenir la congregación de multitudes.

De cualquier manera, México ya tiene el registro de la H1N1, que generó la suspensión de una jornada entera de la Liga MX en 2009 y hasta el retiro de Chivas y San Luis de la Copa Libertadores luego de que la CONMEBOL determinara que jugaran sus compromisos de octavos de final a partido único y como visitantes para no jugar en el país norteamericano.

Por ahora, ni desde la FEMEXFUT ni la Liga MX se han manifestado sobre la posibilidad de suspender la concurrencia al estadio o posponer los juegos, algo que parece lejano dada la cantidad de casos que hay hasta el momento.

Quienes sí se manifestaron fueron las autoridades deportivas de Estados Unidos, con la NHL, NBA y MLB estudiando cómo actuar y la NCAA evaluando realizar los juegos del March Madness sin público. Además, Confederación Mundial de Beisbol y Softbol pospuso sus actividades clasificatorias para los Juegos Olímpicos y la Maratón de Tokio se corrió sin público.

Más allá de esos episodios, la H1N1 se cobró la vida de mil mexicanos e infectó a más de 70 mil más y fue abordada de forma distinta por la Organización Mundial de la Salud. En ese entonces, el primer caso se registró en abril y dos meses más tarde ya había decretado la pandemia fase 6, mientras que mantiene al coronavirus como una crisis internacional y no lo ha catalogado como pandemia aún.

Así, todo parece indicar que seguiremos teniendo futbol mexicano, al menos por ahora, aunque es recomendable seguir las indicaciones de la Secretaría de Salud para prevenir el contagio.