LeBron James es una marca por si sola. El que es uno de los mejores jugadores de toda la historia se forjó, alrededor de él, una imagen que se transformó con el correr de los años como una referencia para los demás atletas. Además, el jugador es hábil en el mundo de los negocios. De hecho, la inversión que realizó para ser accionista del Liverpool en el 2011, cuando el equipo no transitaba por los mejores años, lo demuestra.
En el 2015 LeBron firmó un contrato de por vida con Nike -marca que se adjudicó al crack cuando debutó en la NBA allá por el 2003- en un acuerdo que podría alcanzar los 500 millones de dólares.
Es por ese vínculo que mantiene el Rey con Nike, que expresó en su cuenta personal de Instagram la alegría que sentía que la marca de la Pipa sea el nuevo sponsor del Liverpool, en un acuerdo que rondaría los 105 millones por año a partir de la próxima temorada. ¿Cuánto habrá influido el crack de la NBA?