Ni el peso del apellido ni el temor por el debut fueron suficientes para opacar el día más feliz de la vida de Hernán López Muñoz.

El enganche hizo su primera aparición en la primera de River Plate, el campeón de América. Y si bien su equipo cayó ante Tigre por la última fecha de la Superliga, jamás olvidará lo que sintió al ver la pelota impactando en la red instantes después de haber ingresado.

Corría el minuto 86′ cuando Nahuel Gallardo -otro ‘hijo de’- escapó por la banda izquierda y tiró un centro que Gonzalo Marinelli no pudo cortar.

Por el segundo palo apareció el joven de 19 años, quien celebró pensando quizás en tanto sacrificio por llegar a la Primera división.

El desafío esta presente: en algún tiempo, López solo deseará que ya no lo reconozcan solo como el sobrino-nieto de Diego Armando Maradona. Las condiciones para que esto suceda, por lo visto, le sobran.