Seguramente, al ver una y otra vez la jugada, Jorge Carrascal se arrepiente de su acccionar en el duelo entre River y Banfield del viernes pasado.
Su equipo ganaba por 2-0 y al partido le quedaban pocos minutos, y de igual manera el colombiano se dejó provocar por un rival.
Luego de que lo agarren un par de veces, tiró un golpe que impactó en un jugador del local y de esa manera vio la roja directa.
Al salir, la cámara enfocó la cara que tenía Marcelo Gallardo y la pregunta que le hizo sobre si había sucedido lo que el árbitro vio o no, y el DT no parecía nada contento.
Pero en conferencia de prensa, días después, aclaró todo: “Yo sé que me analizan hasta las miradas, los gestos. A veces cuando me veo, o me enfocan, me veo con cara de ofuscado, pero a veces estoy pensando en otras cuestiones, que tienen que ver con lo que viene”.
Y siguió: “Estaba molesto, porque encima Carrascal es un jugador que considero como uno de los talentos que se ven muy poco en el fútbol argentino. Es un jugador que se compromete desde el juego, pero tiene que seguir trabajando para sumar minutos, y validar todo su talento con mucho más trabajo. Y se le había dado la posibilidad de jugar todo el segundo tiempo completo, y lo estaba haciendo de buena forma”.
Para cerrar, expresó: “No terminar el partido no era bueno para él ni para nosotros, pero lejos estoy de castigarlo, si mostrarle una molestia. Son cosas que pasan, me pasó a mí como futbolistas, son errores de juventud, hay que aprender para que no vuelva a suceder”.